La Corte de Apelaciones de Valdivia ha dado un espaldarazo a los derechos de los pacientes al acoger un recurso de protección que obliga a la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO) a pagar licencias médicas que fueron rechazadas de manera arbitraria. La decisión del tribunal deja claro que no basta con rechazar una licencia; se deben entregar fundamentos técnicos sólidos y no basarse únicamente en informes de la Isapre o peritajes realizados a distancia.
En un fallo unánime, el tribunal valdiviano criticó el actuar de la SUSESO por dar más peso a un peritaje privado y telemático que al informe del médico tratante del paciente. El fallo subraya que ni la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (COMPIN) ni la SUSESO se tomaron la molestia de solicitar nuevos exámenes o una evaluación médica presencial para aclarar las discrepancias entre los profesionales.
«No se explica por qué se otorga mayor valor a lo señalado por los facultativos de la Isapre y la Superintendencia que el que se da a lo informado por el médico tratante», señala la resolución.
En consecuencia, el tribunal de alzada acogió el recurso y ordenó dejar sin efecto el rechazo de las licencias médicas, exigiendo que se dicte una nueva resolución que acceda a la solicitud de reembolso completo de los gastos médicos.
Esta decisión judicial sienta un importante precedente para todos los pacientes que se enfrentan a rechazos infundados de licencias médicas, recordándoles a las instituciones que sus determinaciones deben ser justas, transparentes y bien fundamentadas.